martes, 24 de enero de 2012

Cinco razones


















I

Que desolada belleza
tiene la muerte
…en la otra orilla Caronte
Espera….
Que detalles tan sublimes
en ese féretro

El calor avanza como mortaja
se inmola un recuerdo.
Se murió el amor.
Hoy lo están velando.


II

Como árbol de sólo dos ramas
me deshojaba.
Mis raíces
se secaban.


Entre sollozos
ayer sigue siendo hoy
Un día tras otro.


El tiempo
Inventado de nácares
a intervalos…


Hizo su agosto
amortajándome.


Donde el ayer se repite
como los ciclos
de la tierra.


Sigo caminando
descalza
en puntillas de pie
mi cielo se fue.

III


Si tejiera un manto con mis penas
si con ellas se cubriera mi espalda
si por cada lágrima tallara figuras
tendría un zoológico de cristal.
Luciría un escote lleno de brillos
trasmutaría esas gotas peregrinas
de mi vida plana y haría que brillen
como el arco iris, tornasolado.

IV


Quise llegar alto cruzando
las nubes blancas algodonadas
cruzando la neblina y la lluvia
chocar con el arco iris sin detenerme.
Quise volar en tu cielo estrellado
con giros de golondrina traviesa
y salpicarme de rocío las alas azules
vibré entre mi aleteo diáfana feliz.

Iluminada por el sol olvidé mi peso
no soporté el dolor contorsionando
mi cuerpo, triste y llorando olvidé
el camino de vuelta y caí muerta.

V


Ya no me duele tu recuerdo,
nuevos anhelos, nuevos sueños
surgen vuelve el amor de la
mano tierna y mirada fresca
ya no soy cautiva de tus ojos
ni de tu cuerpo, otro me da paz
otro cuerpo me da reposo.
¡Cuanta pasión atesoró mi alma!
No supe despedirme acuérdate…
Los sueños siempre vuelven.



Nora Noemí Zeliz Pirillo.

©Noemí_Alas


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10-mar-2008

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